El Dr. Mariano Obaid, Staff del Dpto. de Cirugía y del Servicio de Ortopedia y Traumatología de Grupo Gamma, nos cuenta cuales son las patologías asociadas al uso del celular, puntualmente de mano y miembro superior.
El uso de dispositivos móviles (teléfonos celulares, tablets) y de computadoras de escritorio nos lleva a adoptar posturas inadecuadas, afectando el esqueleto, las articulaciones, los músculos y los tendones.
Estas “malas posturas”, sumadas al uso sostenido y prolongado en el tiempo, conforman el “combo perfecto” para el desarrollo de patologías.
Tecnología, aparato musculoesquelético y psíquico
El ritmo de vida estresante, el sedentarismo y la falta de actividad física, con la preponderante participación de la tecnología, nos ha sumergido en un uso permanente y desmedido de dispositivos.
Generando condiciones que no son naturales para el aparato musculoesquelético y psíquico; que afectan la mano y además traen aparejados problemas posturales de columna, de adicción y compulsión a la tecnología generando la necesidad de “estar todo el tiempo conectado” proporcionando un altísimo desorden en el sueño.
¿Cuáles son los síntomas asociados al uso de los dispositivos?
En primer lugar, vamos a decir que si se cumplen todas estas condiciones desfavorables, no hay duda de que vamos a desarrollar síntomas, en mayor o menor medida.
¿Cómo se manifiestan?
- Con dolor. Puede ser puntual o que se irradia por todo el miembro por ej. de la mano al hombro.
- Fatiga de la mano.
- Calambres.
- Falta de fuerza (debilidad y torpeza)
- Hormigueos (entumecimiento)
- Impotencia funcional en todo el miembro superior, desde la mano al hombro (que la extremidad ya no pueda moverse o cumplir su función)
Patologías más frecuentes
Tendinitis o tenosinovitis de tendones flexores o extensores.
Esto incluye a la mano, al codo o al hombro. Dolores de tipo funcionales que se van a acentuar cuando realizamos tareas repetitivas como cocinar o limpiar, o bien en determinadas condiciones laborales o deportivas impidiendo desarrollarlas con normalidad.
Ejemplo de ello es la tendinitis De Quervain en la muñeca.
La epicondilitis del codo o la bursitis y síndrome de abducción dolorosa del hombro.
Artritis por desgaste del cartílago y mala postura sostenida.
Esto se ve muy frecuentemente en el dedo pulgar con la aparición a edades tempranas de fenómenos de inestabilidad y rizartrosis. Dolor al abrir una botella, destapar un frasco, dar vuelta una llave en la cerradura.
Neuropatías por atrapamiento.
Tal es el caso del Síndrome del túnel carpiano, la neurodoscitis del nervio cubital, el síndrome del lacerto fibroso o el síndrome de la arcada de fröhse.
Los cuales todos se cursan con hormigueos en un territorio específico de la mano con falta de fuerza o falta de precisión en tareas delicadas como abrocharse una camisa, calambres y dolores de tipo irradiados de mano a hombro y que se profundizan durante la noche (predominancia nocturna) llegando incluso a perturbar el sueño.
Dedo en resorte.
Esta es una condición que se desarrolla con la tendinitis crónica estenosante. Es decir, ya hay cierto daño de la estructura tisular del tendón que provoca un resalto o traba al intentar usarlo.
Lo más importante, es que se pruebe prevenir ¿Cómo?
- Aprendiendo a mantener una postura correcta
- Intercambiando los dedos de la mano con regularidad para la escritura.
- Utilizar más las llamadas telefónicas o las notas de voz.
- Tomar descansos o cambios de postura cada 15 minutos. Por ejemplo, no estar con el codo flexionado más allá de los 90º más de 20 minutos.
- Realizar ejercicios de elongación o estiramiento de mano, muñeca, codo y hombro (muchas veces supervisados por un fisioterapeuta o kinesiólogo)
- Y en lo posible utilizar herramientas y accesorios ergonómicos que permitan una mejor postura del miembro.
Cuando los síntomas persisten varios días a un mes, o se vuelven más intensos a pesar de haber tomado los recaudos correspondientes o haber tomado antiinflamatorios, debemos acudir a un profesional, afirma el Dr. Obaid.
Un especialista certificado en cirugía de la mano y miembro superior podrá realizar un diagnóstico preciso y establecer un plan de tratamiento adecuado para cada caso.
Muchas veces el diagnóstico es clínico mediante el examen físico y otras se requieren de estudios complementarios para evaluar gravedad.
El tratamiento con medicamentos, la fisiokinesioterapia y en casos seleccionados las intervenciones o cirugía mini-invasivas suelen dar respuesta a tan molesta y discapacitante condición.
Temas
Alentamos su participación a través de los comentarios en nuestro blog. De todos modos, no podemos brindar una opinión médica de un caso en particular, sin una consulta personal con un profesional que analice al paciente. Si usted tiene preguntas relacionadas con síntomas específicos, le recomendamos solicitar un turno con un especialista.
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