El exceso de insulina sostenido en el tiempo estimula a las células de la piel, especialmente las que cubren las áreas flexibles y pliegues del cuerpo como el cuello, las axilas, los codos, las rodillas, las manos e ingles.

Esto hace que la piel se vuelva oscura, gruesa y de apariencia verrugosa y aterciopelada. Aunque no es un problema grave genera incomodidad estética y revela que las células están teniendo problemas para asimilar la glucosa.

¿Es tan grave el problema? 

Debido a que la Resistencia a la insulina ocasiona serios problemas de salud y sus síntomas pasan inadvertidos, es muy importante que el médico examine y realice laboratorio de glucemia insulinemia y de ser necesario un prueba llamada “Curva de Tolerancia a la Glucosa”, que le indicará el grado de sensibilidad que tienen sus células ante la insulina.

Si la insulino resistencia no es tratada a tiempo, el riesgo de desarrollar Diabetes tipo 2 será muy elevado.

Se calcula que las personas que presentan “Hiperinsulinemia” como consecuencia de la insulino resitencia desarrollarán Diabetes en menos de 10 años.

¿Qué podemos hacer?

Afortunadamente en esta etapa, la Diabetes se puede prevenir ó al menos retrasar y la buena noticia es que la insulina y la glucosa pueden ser fácilmente influenciados por simples cambios alimentarios y por el incremento de actividad fisica. En ciertas ocasiones el uso de medicamentos nos ayuda a mejorar nuestra “sensibilidad” a la insulina.

Existen fuertes evidencias que indican que perdiendo peso y manteniéndose en forma mediante la actividad física, le ayudará a que las células de su cuerpo recuperen “sensibilidad a la insulina” y por tanto sean menos “insulino resistentes”.