El acné es una enfermedad multifactorial (intervienen múltiples y variados factores) en donde está involucrada la unidad pilosebácea, y se manifiesta clínicamente por la aparición de comedones, pápulas, pústulas, nódulos, quistes y abscesos que pueden dejar como residuo cicatrices.
Se localiza en áreas de la piel en las que abundan los folículos pilosebáceos y con sensibilidad particular a los andrógenos, como la cara, el pecho y el dorso del tronco; en casos más severos se extiende a la mitad inferior del dorso y al tercio superior de brazos.
Su variantes clínicas van desde formas no inflamatorias, hasta inflamatorias y muy severas que pueden comprometer el estado general (como el acné fulminans).
Los principales factores en la aparición del acné son: la hiperplasia de la glándula sebácea; las alteraciones en la queratinización folicular; la infección del folículo por una bacteria (Propionibacterium acnes), la inflamación y la respuesta inmune.
Epidemiología
- La mayor frecuencia se registra entre los 12 y 24 años de edad.
- La edad de comienzo varía de 12 a 13 años en la mujer y 13 a 14 en el hombre.
- El pico de severidad se observa entre los 17 y 18 años en la mujer y entre los 19 y 21 años en el hombre.
- La historia de acné en la familia, padre o madre, aumenta el riesgo en los niños.
Clasificación:
- Acné Comedoniano: el elemento clínico primario del acné es el “comedón” el cuál tiene dos características: abierto y cerrado. Los comedones abiertos son los llamados “puntos negros”; son dilataciones del folículo sebáceo, de 1 a 2 mm de diámetro, de superficie oscura casi negra que probablemente se deba a la oxidación de la melanina. Los comedones cerrados, de 1 a 3 mm de diámetro, con superficie blanca, con un orificio apenas perceptible. El estiramiento de la piel ayuda a detectarlos.
- Acné papulopustuloso: las lesiones predominantes son pápulas de 1 a 5 mm de diámetro, rojas sensibles y las pústulas se observan como conos blanquecinos aislados o sobre una base eritematosa. De acuerdo a las características clínicas, el número y la extensión de las lesiones, se clasifican en leve, moderado y severo.
- Acné noduloquistico: se presenta con lesiones inflamatorias profundas de 5mm de diámetro, blandos en su superficie, dolorosos a la presión que al desaparecer dejan cicatrices. Según la cantidad, extensión y severidad de las lesiones se clasifican en moderados y severos.
Formas especiales de acné:
- Acné Conglobata: Afección inflamatoria crónica y severa que generalmente afecta varones de 18 a 30 años. Las lesiones exceden la localización típica del acné y se presenta con comedones con múltiples aperturas, pápulopústulas, nódulos y abscesos fistulosos drenantes que dejan cicatrices severas deprimidas y queloides.
- Acné Fulminans: Forma aguda y severa, propia del varón, de comienzo súbito, de lesiones pustulosas localizadas en dorso y tórax, que evolucionan a úlceras necróticas dolorosas con costras hemorrágicas y cicatrices residuales. Se acompaña de fiebre, adenopatías, poliartralgias, mialgias y otros síntomas sistémicos.
Imagen: contigosalud.com
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