La videocolposcopía es un estudio clave en el diagnóstico de las lesiones precursoras del cáncer de cuello uterino relacionadas al virus del papiloma humano, conocido como HPV, debido a que permite la detección de lesiones no solo del cuello uterino, sino también de la vagina, vulva y región perianal y anal, asiento frecuente de lesiones concomitantes por el HPV.
El videocolposcopio consta de un equipo de visualización magnificada a través de un sistema de aumentos ópticos y una fuente de luz llamado colposcopio. El mismo se encuentra conectado a una videocámara de alta resolución cuyas imágenes son transmitidas a una pantalla, lo cual permite observar las mismas durante la realización del estudio tanto por el médico como por la paciente y en forma diferida a través del registro de esas imágenes en forma de fotos o colpofotografías.
Para la realización de la videocolposcopía se realiza la aplicación en el cuello uterino de diferentes sustancias que reaccionan con la superficie que cubre al mismo, produciendo imágenes blancas o alteraciones vasculares que se correlacionan con lesiones de diferente grado e importancia clínica, lo cual permite en el mismo procedimiento realizar la biopsia guiada videocolposcopicamente con excelente precisión diagnóstica. Mediante la aplicación de la técnica de endoespeculoscopía es posible evaluar videocolposcópicamente el trayecto inicial del conducto endocervical, asiento frecuente de lesiones y efectuar la biopsia guiada de las mismas.
La videocolposcopía encuentra formalmente indicada ante la presencia de un papanicolau anormal y en el control posterior al tratamiento de lesiones, sin embargo presenta un considerable valor como estudio complementario del papanicolau normal debido a que incrementa sus probabilidades de detección de lesiones. Además permite archivar e imprimir las imágenes obtenidas, lo cual presenta gran valor en el control y seguimiento de lesiones.
La videocolposcopía es un estudio ambulatorio, no es doloroso ni invasivo, que no requiere preparaciones previas, sino condiciones para su realización como la ausencia de sangrado, relaciones sexuales, colocación de óvulos o cremas vaginales 48 horas antes, con el objetivo de optimizar la práctica.