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10 ideas falsas sobre las dietas
lunes 28 de mayo de 2012

10 ideas falsas sobre las dietas

28 de mayo, Día Nacional de la Nutrición

Las dietas son consideradas un ritual para los que luchan contra los kilos. Al pasar el tiempo la ciencia se opone cada vez más a las dietas clásicas y restrictivas…..porque es mejor olvidar los mitos de vivir a lechuga y comenzar por aprender a comer. Repasemos algunos de los mitos más comunes:

1. Hacer dieta es la mejor manera de perder peso. Las últimas investigaciones concluyen todo lo contrario: las dietas hipocalóricas (menos de 1200 Kilocalorías al día) no son efectivas a largo plazo, recuperando el peso perdido dentro del primer año de la etapa de mantenimiento. Por ello, el plan alimentario debe estar acompañado de educación alimentaria para crear nuevos hábitos y de actividad física en forma periódica.

2. Todo es cuestión de las calorías. No solo son importantes las calorías de los alimentos sino también la calidad de esas calorías y el poder de saciedad de dichos alimentos y cómo influyen en nuestro metabolismo usando como guía la carga glucémica y el índice glucémico de los alimentos. El índice glucémico es la capacidad que tienen los alimentos de elevar el azúcar en sangre, después de ser ingeridos, en diferentes velocidades. Los que lo hacen lentamente “índice glucémico bajo” darán más saciedad por más tiempo con menor impacto en nuestra insulina.

3. Para adelgazar no hay que comer pan, papa, pastas ni postres. Las dietas que prohíben alimentos están destinadas a fracasar ya que el cuerpo y la mente necesitan diferentes alimentos para no tener carencia de nutrientes. Además, toda dieta debe tener como mínimo un 50% de hidratos de carbono (legumbres, cereales, frutas, verduras pastas, etc.). Es así, como antes se le hacia la guerra a los fideos, en la actualidad nos fijamos las salsas que los acompañan y las porciones que servimos en el plato. Además si son cinta gruesa al dente, tirabuzón, moñitos o integrales mejor aún ya que tienen índice glucémico bajo!

4. Eliminar las grasas y aceites para bajar de peso. Uno de los errores es pensar “cero grasas” ya que el cerebro si no recibe grasa o glucosa pone en marcha diferentes mecanismos que disparan el hambre y el sistema de ahorro para que el organismo consuma menos energía. Los aceites proveen ácidos grasos esenciales (no fabricados por nuestro cuerpo) para formar hormonas, membranas celulares, vitaminas liposolubles y también son fuente de energía. Por ello hay que consumirlos pero con moderación y siempre es preferible elegir los de origen vegetal (girasol, maíz, soja, canola, uva, oliva, lino, chía, etc.).

5. No mezclar los hidratos y las carnes en una misma comida. Son las llamadas dietas “disociadas” que a lo largo de numerosos estudios no se comprobó que comer los hidratos de carbono y las proteínas por separado sea bueno para la digestión o ayude a bajar de peso. Además muchos alimentos tienen los dos componentes como las frutas secas, legumbres, etc. ¿Cómo hacemos para separarlos?

6. ¿Los alimentos dietéticos ayudan a bajar de peso? Son arma de doble filo ya que con la excusa de que son Light, bajas calorías o dietéticos la gente tiende a consumirlos en mayor cantidad que si se tratara de alimentos comunes. Los productos Light tienen 30% menos de calorías o la mitad de las grasa que el original pero no son cero calorías. Hay que leer las etiquetas y prestar atención a las porciones.

7. Adelgazar es cuestión de voluntad. Lamentablemente esto es uno de los errores que hacen que no pensemos a la obesidad como una enfermedad crónica y compleja, en la cual se involucran muchos componentes de adicción como factores bioquímicos, emocionales, culturales y genéticos. Lo fundamental es comenzar a identificar la sensación de hambre y saciedad y el registro de “stop” que generalmente en el obeso esta borrado, apareciendo la sensación de frustración cuando siente que siguieron comiendo y en realidad no estaban satisfechos. Uno esta lleno de comida pero no es eso lo que buscaba.

8. Para quemar calorías hay que ir al gimnasio o trotar. Quemar calorías no necesariamente es dentro de un gimnasio. Lo que cuenta es un estilo de vida activo que implique moverse aun sin ponerse las zapatillas. Así como dosificamos la comida en varias ingestas al día podemos hacer lo mismo con la actividad física. Si lo ideal son 30 minutos al día podemos dejar el auto o bajarse antes del colectivo, unas 10 cuadras antes, en el trabajo o mirando tele levantar las piernas, mover los pies y hombros, subir las escaleras, caminar un rato, etc. Moverse ese es el secreto!

9. Para bajar de peso no hay que cenar. Esta idea popular no tiene sustento científico. Si se recomienda cenar liviano (evitando porciones abundantes, carnes grasosas, cremas, etc.) y separar la comida de la hora de dormir. Si se va a la cama con hambre hace que tengamos insomnio, atracones nocturnos o nos levantemos con hambre voraz. La verdad es que las calorías no saben de horarios; se queman y almacenan las 24 horas. Además con el estomago vacío se segregan hormonas que llevan a mayor deposito de grasa y disminución del gasto calórico.

10. Si duermo menos, adelgazo. Hoy se duerme un promedio de 7 horas y quedarse despierto mirando tele, chateando, o salir hasta la madrugada aunque tengamos que levantarnos temprano en la mañana se paga con kilos de más. Diferentes investigaciones demuestran que dormir menos de 8 horas trae aumento de peso y obesidad por traer disbalance de las hormonas encargadas de controlar el apetito, gasto de energía y depósito de grasa.

Continuar leyendo: 10 verdades sobre las dietas

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